Dejo ir el 2016...

Y como tradición autogenerada, comparto mis reflexiones sobre este año al que le quedan horas... 

Y como ritual adquirido repaso todo eso que me ha dado este año...

Este 2016, al que dejo atras con gratitud,  ha sido un año en el que la vida me ha dado la oportunidad de trabajar mis miedos, mi apego y mi fuerza.

Mis miedos, porque todo eso a lo que le temía se ha hecho presente: perder amistades, organizarme mal, perder dinero, enfadarme con mi familia, romper con todo, sentirme sola, no ver más allá de hoy, encontrarme sin rumbo, enamorarme... incluso se han hecho presentes miedos que ni siquiera sabía que existían, a quedarme sin coche, a empezar de nuevo, a que me quieran y que me lo demuestren, a compartir, miedo a no ser aceptada, a sentirme vulnerable, a sentirme feliz, a aceptar lo que tengo, a sentirme ansiosa, a vivir mi propia vida... 

Mi apego, porque he aprendido a soltar, sobretodo a personas, ya sea por obligación o por decisión...

Y ha sido en ese soltar en el que me he dado cuenta que era lo que valoraba, la compañía, la estabilidad, su mirada hacía mi, el sentirme importante, el no tener que tomar decisiones, el vivir la vida de los otros para no ocuparme de la mía... 

Mi fuerza, en todos esos momentos en los que aparecen las partes más oscuras de uno mismo, he tenido la fuerza para seguir adelante, seguir aprendiendo y seguir andando. He apostado por mi, y por todo eso que me hace feliz y me hace vibrar... 

Esta fuerza, es tan grande o más que todos mis miedos y todos mis apegos juntos y hoy me siento agradecida y tranquila, porque mi fuerza reside en todxs los que me rodean y a pesar de mis sombras, permanecen a mi lado, por elección, por que existe reciprocidad y aportan valor a mi vida y yo aporto valor a la suya...

En este camino me doy cuenta que el miedo se transforma en motor, y el apego se transforma en amor... 

Por tanto me planteo, ¿y hasta donde puedo llegar con un motor que se mueve con amor? 

Bienvenido entonces... 2017! 😌

Gracias... 2016! 🙏🏼

Salta, Atrévete, Vive

Cada experiencia que tengo, cada momento que vivo, confirman frases del estilo "todo pasa porque tiene que pasar", "al final todo saldrá bien, y si no sale bien es que no es el final" o "cambia tu forma de ver las cosas y las cosas cambiarán".

Os comparto una versión más académica de estas frases de empoderamiento, el discurso de Steve Jobs en la Universidad de Stanford, en el que habla de observar hacia atrás y conectar los puntos, para confirmar que toda experiencia guiada desde el corazón tiene una utilidad.

Hace unos días tuve la "desfachatez" o la "valentía" (según se mire) de soltar a mi compi de viaje, un Beagle, al que llamo Buddy.

Llego a mi vida hace cinco años, nuestra relación ha sido un gran aprendizaje para mi, me ha enseñado y me sigue enseñando a poner límites, transformando la pena por compasión. A querer incondicionalmente desde la libertad y el respeto.

Para que os hagáis una idea, es un perro de caza, al que no había sido capaz de enseñarle la orden "ven", y eso me costó un disgusto, hace unos días.  Como os contaba, me dio por soltarlo en una riera infestada de conejos, creyendo firmemente que volvería a la primera llamada... Valiente inocente, valiente inconsciente, jijijii

Con la de veces que Buddy, había hecho algo así, y la de veces lo he permitido sin hacer nada, ahí mi pensamiento mágico...

En definitiva, el paseo acabó cuatro horas más tarde, con medio barrio movilizado, buscando al perro. Cuatro horas en las que me sentía en completa ebullición, mis emociones eran un hervidero, mi cabeza no paraba de lanzarme mensajes de aquellos tan bonitos del tipo: "te lo tienes merecido", "si es que ya sabía yo"... Mi cuerpo se comportó, se mantuvo alerta, bombeando sangre lo más rápido que podía, me conecte a la respiración para ir ayudándolo.

Con el cuerpo en marcha me tocó ocuparme de mi mente y de mis emociones...

Así que decidí darle trabajo a mi mente, ese para el que esta diseñada: analizar para luego resolver, la instrucción fue fácil: "Observa que sientes y exprésalo en voz alta".

De vez en cuando se colaba algún pensamiento no útil, que verbalizaba también, y le daba las gracias, diciéndole que no era útil. Le pedí a mi mente que me ayudase a desmontar esos pensamientos.

Imaginaros que imagen, una chica paseando por la riera, hablando sola, gritando de vez en cuando "Buddy", jajajajaja, todo un show...

Había pasado una hora desde que empecé a buscar a Buddy, fue cuando me encontré con unos chicos que se ofrecieron a ayudarme, luego mis amigxs (mi red) aparecieron para ayudarme, me dieron ideas de por donde podía estar, también empecé a pedir más ayuda. La verdad es que fue increíble como la red iba respondiendo.

Al final todo acabó bien, un aprendizaje, una actuación de cara al futuro, una lección de que la vida es una experiencia para que aprendas, seas atrevido, sientas, pienses, corras, llores, te rías...

Prueba a llegar despeinado, con algunas magulladuras y el sacó lleno de aprendizajes y con la certeza de que cuando te ocupas de ti mismo y de tu red, construyes tu paracaídas para con la incertidumbre....

Fusió...

... no sé que pasó todo se tornó de un color un poco más oscuro, no podía parar de llorar, las horas parecían interminables minutos, no era yo, era otra persona, como si todo eso que sentía se hubiese apoderado de mi, las decisiones que había tomado a conciencia ya no tenían validez ninguna...

Esto es un ejemplo de lo que podemos sentir cuando nos fusionamos con una emoción, cuando es ella quién toma el control de nuestra vida...

En el texto de más arriba, la fusión es con la tristeza, esto pasa también con la alegría, con la euforia, la ira, la decepción, la ilusión, la apatía, gratitud, esperanza, orgullo, diversión, etc...

Cuando la emoción predominante es la serenidad, la alegría, la gratitud, no existen consecuencias negativas a esa fusión, más bien es útil, de cara a los demás y a uno mismo...

¿Qué pasa cuando la emoción proviene de una situación dolorosa? La debemos atender, aprender a defusionarnos y a ocuparnos de ella...

Defusionarnos, palabreja...

... significa hacernos conscientes que la emoción es el resultado de esa situación o de algo que nos recuerda a algo doloroso
... significa que la emoción no somos nosotros, por lo que no nos define como personas...
... significa ser conscientes de que sentir es humano y fusionarnos también...
... significa observar esa emoción sin taparla, pues nos dará información muy valiosa sobre nosotros mismos...
...significa agradecerle su presencia, aunque resulte incómoda a veces...


Cuando somos capaces de defusionarnos podemos actuar desde la libertad...

Este es un aprendizaje para valientes, porque requiere de valor para ser capaz de mirar hacia adentro, de parar y respirar, de traspasar el dolor y las emociones asociadas. ¿y tú quieres aprender?

Esencia...

Aquí y ahora...

Mindfullness... 

Originalidad y Creatividad... 

Rutinas y hábitos...

En esta época en la que la consciencia toma protagonismo y también el estar centrado en el presente, sentirnos perdidos en la inmensidad de sugerencias para vivir el aquí y el ahora es totalmente normal, forma parte del proceso, de crecer en el autoconocimiento... 

Me apetece recordar que mirar hacia el pasado sólo sirve si lo haces para agrupar recursos y aprendizajes... Mirar hacia el futuro sirve para recordarnos que nuestra existencia es de tiempo limitado, por lo que el destino ya esta fijado y sólo resta decidir cómo y con que valores queremos llegar hasta él...

Hoy en día el Mindfullness es una asignatura casi obligatoria en todos los ámbitos de nuestra vida (profesional, familiar y personal) y que cuando lo practicamos aparecen trocitos de pasado y sugerencias de futuro, y eso nos hace dudar acerca de nuestra capacidad para llevar a cabo esta nueva habilidad...

Nos conectamos a las redes sociales y los mensajes de esta nueva ERA están por todos lados, frases de autoayuda, que apelan por la originalidad y por la creatividad: crear un estilo de vida original, lleno de momentos para fluir y vivir plenamente...

Y son estos los que nos llevan a modificar nuestros hábitos y rutinas para instaurar otros seguramente más sanos y más acordes con esa conexión con el momento...

Y si, todo eso está muy bien, siempre y cuando no nos olvidemos de nuestra esencia, de eso que realmente mueve y nos mueve... El AMOR

¿Cuantos os habéis dado cuenta? He empezado con un acrónimo... 😌

El yin-yang

_ ¿Y tú qué haces con esas emociones desagradables?

_ ¿Desagradables? Tipo la tristeza, angustia, miedo, ira_ contestó_ Pues, lo que todo el mundo, lucho contra ellas, me molestan y no las miro o las rechazo... Total, si duelen, ¿para qué las quiero?

Y verás por la calle, miles de emociones desatendidas, tristezas sin cuidar ni escuchar, preocupaciones angustiosas, divagando y deambulando, abandonadas por todas esas personas, interesadas, solamente por sentir alegría, euforia, felicidad, calma...

Y esas, las tan preciadas emociones positivas, que nos aportan tanto bienestar, ellas sí que van por la calle con la cabeza alta, orgullosas y dicharacheras, siempre en compañía o perseguidas por personas que están completamente desesperadas por estar con ellas...

Y no se sabe por qué, cuanto más nos empeñamos, en rechazar a las primeras, más se alejan las segundas, que paradoja ¿verdad?

Lo que desconocemos, hasta que alguien nos lo cuenta o lo experimentamos (sin querer), es: que para que exista una debe estar la otra, para sentir plena alegría, debemos estar dispuestos a sentir plena tristeza, para experimentar la calma es necesario escuchar a la preocupación... 

Nos guste o no, las emociones "negativas" van de la mano de las "positivas", y cuanto más rechacemos a las primeras, más se alejarán las segundas...

Y tú ¿Te atreves a escucharlas?

Y entonces llegaste tu...

Existen momentos en los que la vida te ofrece regalos, esos tan inesperados, de un valor tan grande que tu alma tarda varios días en asimilarlos...

Estás perplejo e intentas comprender, ya que es amor verdadero, es un amor que escojes, libre y recíproco.

Es el amor emergente de la amistad, ese tesoro valioso que puede tener una antigüedad de toda una vida o de tan solo unos meses, ese amor que no distingue de géneros y si de actos...

Es un amor que te escucha, que te apoya, ofrece risas y comparte llantos, que ilumina tu camino en los momentos más oscuros y te ayuda a aterrizar cuando vuelas demasiado alto...

Inesperado y genuino, que permanece, porque por alguna razón, como si de la fuerza de la gravedad se tratase, te unes a esas personas, a las que llamas AMIGOS, y pueden pasar años luz, agujeros negros, tormentas o calurosos veranos, que cuando necesitas, cuando tu corazón lo pide, aparecen sin preguntar, para regalarte unas cuantas sonrisas y justo eso que necesitabas escuchar...

Gracias mis amores, los antiguos, los nuevos y los que están por llegar!!!

A mi miedo...

Y a mi miedo le digo: 

"No reflejas la realidad, sólo me muestras lo que desconozco. Es por eso que te doy las gracias. Por avisarme, por ayudarme a estar atenta. 

Estoy haciendo todo eso que esta en mis manos para avanzar y alcanzar lo que quiero. 

Te pido que le des un espacio a la paciencia y a la actitud positiva, para que la vida me sorprenda. 

Ya que si nos ponemos a la defensiva, todo lo bueno se irá.

Sigue avisándome para que pueda estar atenta... Ya que... DEL RESTO ME OCUPO YO.

Gracias"

Amor adulto...

Hoy he aprendido una verdad, algo había leído en algunos libros y algo de lo que había escuchado hablar en ciertas ocasiones, pero que nunca había sentido... 

El amor incondicional en la pareja no existe...

Ese amor, sólo te lo pueden regalar tu madre y tu padre, esas personas que te han regalado la vida, y que te han ofrecido lo que tenían para dar en ese momento y que lo hicieron y lo hacen lo mejor que saben...

Amor en la pareja es aceptación, confianza, comunicación y libertad, sin pedir nada, sin exigir nada, porque cada uno lleva su carga y sigue su camino... Y ese camino puedes escoger con quién lo andas... Si la otra parte esta de acuerdo, lo recorrerá contigo, si no, es más sano para ti y para el que tienes al lado, que  lo dejes marchar...

Un amor adulto, no obliga, se da y se recibe, en equilibrio, fluye, es sencillo y ofrece comprensión y complicidad, regala crecimiento, alegría, ayuda y te reta... Se construye... No responsabiliza al otro de tu felicidad, esa es SÓLO TUYA... Decides con quién la compartes...

Por eso me recuerdo, encuentra tu camino, y en él, en ese que has escogido, y en el que no te sientas perdida, emergerá un amor adulto, puesto que el incondicional, ya lo tienes, sólo tienes que recibirlo 😊

A mi...

Quan no és un, és un altre i quan no, la soledat... 

Amb aquestes deixo que el meu somriure i la meva vitalitat quedin tancades en una gàbia de pensaments...

Es complex i alhora senzill... Em vull deixar viure amb energia i sense preocupació.

Em perdono, em perdono per no voler estar sola, per voler estimar i no estimar-me a mi, per voler donar als altres i no fer-ho amb mi mateixa.

Em perdono per donar més als altres que a mi mateixa.

Em perdono per ser egoísta, per enfadar-me, per no ser perfecte, em perdono per cada cop que m'he equivocat, per cada vegada que he marxat de la meva realitat, per cada cop que no me n'he ocupat. 

Per desocupar-me de la meva vida i ocupar-me de la resta.

Per voler aferrar-me i no deixar-me respirar, per tractar als altres de la mateixa manera.

Em perdono per esperar, per estar confosa, per girar, per tombar, gaudir a mitges i no amb tot el meu èsser. Per deixar que la ment ho controli. 

Em dono permís per ser feliç, per estimar, a mi primer i després als altres, per tindre dies bons i dolents, per no posar a ningú a prova, per no voler res de ningú, per desitjar i per tindre por.

Em dono permís per ser humana! 😋